Reseña: Tlatelolco, Verano del 68

Título: Tlatelolco, verano del 68

País: México

Año: 2012

Directores: Carlos Bolado, Fernando Sariñana

Reparto: Juan Manuel Bernal, Cassandra Ciangherotti, José Ángel Bichir, Christian Vázquez, Roberto Sosa, Alejandra Ambrosi, Alex Perea, Teresa Ruiz, Luis Fernando Peña, Armando Hernández

Duración: 105 minutos

Sinopsis: “Tlateloco es una historia en una ciudad con grandes héroes y villanos; también una historia de amor entre dos estudiantes de distintos estratos sociales. Propuesto como el primer país del tercer mundo en ser anfitrión de los Juegos Olímpicos, la Ciudad de México se encuentra bajo la mirada microscópica del resto del mundo. La tensión aumenta. El gobierno se esmera por embellecer la ciudad y por darle al mundo una imagen de estabilidad, pero la Capital está más inquieta que nunca. El Movimiento Estudiantil confronta al gobierno con marchas y plantones. En este contexto, nuestros personajes convergen desde distintos estratos sociales y desde distintas posiciones del entorno, haciendo que momento a momento fluyan las emociones y la sorpresa de lo inesperado. Una historia de amor épico dentro de un marco histórico que sigue generando controversia”.

No sé lo que pasa pero película mexicana que programan en el Festival Internacional de Cine de Morelia, película que al estrenarse en todo el país nada más no pega… se desinfla. Creo que los críticos profesionales siempre andan como locos tratando de armar sus horarios y haciendo una limpia de contenido así del estilo: -Ésta de aquí también está programada para la Muestra Internacional de Cine, no la voy a ver aquí… ésta ya tiene distribuidora… estas dos las van a poner en el tour de cine francés, entonces luego… ¡Ah, ésta está bien difícil de que la estrenen comercialmente! Voy a ver esa…- y pues esa sobreoferta afecta a los trabajos mexicanos pues muy rara vez se lee alguna nota de más de un párrafo.

Además, cuando los locutores, periodistas o conductores hablan de alguna película del festival son bien arrogantes y dicen cosas como: -Huy sí, y vi a fulanito(a) en el festival durante la fiesta que hicieron después de la proyección… fuimos a comer al restaurente X y nos encontramos a…-

Es decir, se la pasan comentando frivolidades de que si hicieron tal o cual cosa y de las películas no dicen nada, no generan expectación, no hacen su labor.

Otro gallo nos cantaría si dijeran: Ayer fuimos de los afortunados que vimos la proyección de la película Z y algunos datos de la película son los siguientes… estén pendientes de su estreno… ya viene…

Por ejemplo, los pinches gringos desde antes de que siquiera exista una película (ya no digamos que la empiecen a rodar) ya sacan que el póster o el arte y la súper promocionan. Y cada cierto tiempo te dicen: Ahí viene, ya pronto… sacan fotos de la producción, arman un pre-avance con lo poco que tienen filmado y te lo muestran a cada rato… y aquí en México, hasta tienen las películas ya terminadas y no pasa nada.

Pero ya no hablemos de lo que hubiera sido y hablemos de lo que es:

Lo que usted diga señorpresidente...

Desde noviembre del 2012 esperaba esta película con ansias por todos los actores involucrados en Tlatelolco, verano del 68 unos por que son muy buenos y otras porque están muy buenas (jajaja pequeña broma, las chicas son talentos verdaderos):

El magnífico Roberto Sosa que viene de El Fantástico Mundo de Juan Orol (Sebastián del Amo, 2012), Alex Perea que me sorprendió con Kid Chamaco (Miguel Necoechea, 2009), y Luis Fernando Peña que es un gran actor (me atrevería a decir que de los mejores intérpretes masculinos que tiene el país) que desafortunadamente, luego de un gran inicio, ahora solo le dan algunos papeles (Crónicas Chilangas, Sin Nombre, Desierto Adentro)… también aparece Armando Hernández que ha afianzado su carrera con varios títulos como Colosio: El Asesinato (Carlos Bolado, 2012), Año Bisiesto, Rudo y Cursi, El Búfalo de la Noche o Fuera del Cielo.

Por parte de las mujeres: Alejandra Ambrosi a quien apenas la conocí por Luna Escondida-Hidden Moon (Pepe Bojórquez, 2012) y que me dejó un buen sabor de boca. Y qué decir de la hermosa y talentosa Teresa Ruiz que triunfó en Cannes con Año Bisiesto y tiene dos películas en cartelera este momento: Ciudadano Buelna (Felipe Cazals, 2013) y precisamente ésta de Tlatelolco, verano del 68 donde comparte cámara nuevamente con la ahora protagonista de la película: Cassandra Ciangherotti.

Así que como ven, el cine mexicano es muy compacto. Casi todos los actores que mencioné ya han trabajado entre ellos y lo más importante: Han sido reconocidos por su gran talento (fuera y dentro de México)… lo único que falta es la lana para que salgan en más películas.

No les voy a mentir, yo solo iba  a ver a los actores y como medio había le leído que la trama no era propiamente sobre el movimiento estudiantil sino una historia de amor ubicada en el 68… pues no iba de exigente jajaja.

Además, al estar involucrado Fernando Sariñana en el proyecto; muchos empezaron a decir: -Es Amarte Duele pero en Tlatelolco-

Wey: ya te la bajaron y tú... comiéndote al abuelo - Por la Libre (2000)
Allá afuera hay una revolución y tú... cogiendo con el enemigo - Tlatelolco, verano del 68 (2012)

La película SÍ es entretenida y tiene muchos detalles interesantes. Sin embargo, Tlateloco, verano del 68 compite visualmente con Borrar de la Memoria (Alfredo Gurrola, 2011) y déjenme decirles que Borrar de la Memoria se lleva de calle a Tlatelolco. Como en las escenas de la matanza que te quedas con la boca abierta PEEERO, en Borrar de la Memoria sale un idiota que tiene de actor lo que yo de astronauta: Rodrigo Virago.

Ese pelmazo de Virago arruinó la película: Cero dicción, cero encanto… un perfecto idiota como lo dije… y en Tlatelolco el nivel actoral sí está muy bien.

Así que habría que editar estas dos películas: Meterle a Tlatelolco, verano del 68 las escenas magníficamente ambientadas y recreadas que tiene Borrar de la Memoria. Sin embargo, sólo son recursos técnicos los que llaman la atención de Borrar de la Memoria, preferible ver buenas interpretaciones como las de Tlatelolco.

¿Y qué tal está la película? ¿De qué trata?

Félix (Christian Vázquez) y Ana María (Cassandra Ciangherotti) son dos chicos universitarios que comparten el mismo cielo, el mismo tiempo, son partes de la misma historia pero pertenecientes a estratos distintos: El joven estudia arquitectura en la UNAM y viene de una familia humilde. La señorita es alumna en la Ibero y es de clase acomodada… el destino trazó el camino y su amor floreció.

Su amor incomprendido enmarcado por los sucesos históricos que poco a poco van tomando forma, se ve amenazado por el padre de la chica (Juan Manuel Bernal) quien es un político muy cercano a las esferas del poder como el lacayo del señorpresidente: Luis Echeverría. Y éste no desea que su hija se contamine al salir con el peladito.

Conocemos a los amigos de esta pareja, los movimientos estudiantiles, la represión… pero siempre volviendo a la historia de amor de estos dos chicos.

Vemos junto con los protagonistas, momentos clave de la historia como las marchas, huelgas, los actos criminales de los soldados y la fuerza pública prepotente e impune contra los estudiantes y la sociedad simpatizante.

Gran elenco pero casi parecen cameos...

No me voy a meter en la parte de lo político y todo lo histórico porque obviamente, ésta es una película de amor. Entonces, hablemos del amor y de los jóvenes:

Existen infinidad de detallitos que se les pasaron a los de Tlatelolco, verano del 68: Todo lo que dicen (el leguaje pues) sí está muy descuidado, así no hablaba la chaviza de los sesentas.

Hay una escena en la que los jóvenes traen un disco L.P. de The Doors. Eso es, además de ilógico; imperdonable. Esos discos únicamente les llegaban del gabacho a quienes tenían un familiar por allá o a alguien que viajaba a gringolandia y los traían medio de contrabando, por no mencionar que los discos eran carísimos… La gente como Felix o sus mismos amigos ni en sueños podrían comprar ya no digamos un disco L.P. de 33 rpm de The Doors sino de cualquier artista mexicano. Lo que se compraba en esos tiempos eran discos sencillos de 45 rpm (que solo traían dos canciones: una del lado A y otra del lado B) no todo el álbum completo de un artista, eso era para ricos…

Además, los gustos musicales rocanroleros de ricos y pobres, eran como esos cigarros: “Bien diferentes” los riquillos escuchaban a The Beatles, Dylan y los otros; a los Rolling, Creedence y grupos mexicanos.

Esa escena me hizo ruido jajaja pero se recuperan cuando toman el cuarto de Ana María y efectivamente, vemos que ella sí tiene una colección de discos L.P. (desafortunadamente las portadas de los discos de The Beatles son mexicanos y no americanos de Capitol Records como tendría que haber sido) porque, vuelvo a recalcar, lo pobres compraban sencillos de 45 pulgadas, los ricos: los L.P. de 33” y americanos.

Ahora, no me gustó que si supuestamente ésta era una historia de amor, no se molestaran ni tantito en mostrarnos el romance de la pareja: Que los viéramos en una fuente de sodas tomando una malteada, saliendo de algún cine o en su caso, aprovechar el tema de “la pobreza” y mostrarnos a Felix cómo buscaba los centavos para invitar a su chava a salir… es decir, que revivieran los 60’s. Ya hasta me estoy imaginando la escena: De fondo una canción como Hey Lupe, mientras vemos un montaje de la pareja divirtiéndose por el México de los sesentas que ya se nos fue… pero terminan dando la vuelta por C.U. ¿No qué muy historia de amor y no sé qué?

Presentación de la cinta en el Festival Internacional de Cine de Morelia

También hubiera agradecido ver cómo sufría Felix desplazándose de su cuartito jodidón hasta la zona del pedregal (o donde vivía la niña) ¿Qué tal si ni para el camión tenía y viajaba “de mosca”? O que la invitara a cenar pero terminaran comiendo tacos porque no juntaba para el ice-cream.

Digo… esto era una historia de amor ¿No? pero confundieron el amor con el sexo y nos muestran nada más la cogedera de la pareja (que se agradece pero no era lo que esperaba ver de esta pareja épica). Se los digo porque a mí me tocó que estaba pretendiendo a una chica que vivía (vive) en la colonia Roma y pues yo estoy hasta Aragón y me tomaba como hora y media llegar a su casa y eso… en metro. Ahora imagínense que Felix viajaba en camión y hacía horas, que a lo mejor llegaba bien tarde a su cuartucho… y que tenía que levantarse temprano para ir a la Universidad.

Ya saliéndome del tema, una vez invité a esta misma chica de la Roma a cenar a un restaurante bien acá y me acuerdo que después de ver la carta, me fui al baño a contar mi dinero para ver si me alcanzaba… o sea, son experiencias de la vida real… nada de eso vimos en Tlatelolco. (Por cierto, sí me alcanzó el dinero ese día jajaja).

Lo que sí me agradó es que Felix esté escuchando la radio y pasen constantemente la rolita de: “Ahora Estoy Solo” con los Hitters pero vuelven a fallar al poner música en inglés que la mera verdad casi ni sonaba en esa época… si el problema eran los derechos de autor pues hubieran recurrido a pura música de rock en español ¿Dónde están los Belmont, los Locos del Ritmo? Algo que también se les olvidó (porque tendemos a idealizar las cosas) fue que si bien el rocanrol era la música de la chaviza, también sonaba fuerte Javier Solís, la música ranchera y el bolero cuyos derechos de autor no creo que sean tan difíciles de conseguir. Otra cosa horrenda es que no hay ninguna mención a la literatura de la época ¿Dónde quedaron los autores del llamado boom latinoamericano? No, no... ésta película está muy vacía, nada de contexto pero de algo a nada, mejor escuchar “Ahora Estoy Solo” una canción bien bonita…

Insisto que si la tirada de Tlatelolco, verano del 68 era una historia de amor, le faltó muchísimo... dije desde el inicio que no iba a hablar del tema político porque la cinta era un romance épico. Y lo que son las cosas: lo mejor de este trabajo son precisamente las escenas de temática política, desde el desaprovechado personaje de Juan Carlos Colombo como un viejo revolucionario que entra con calzador, hasta Roberto Sosa como el señorpresidente de quien tenemos una escena final con material de archivo original que nos da un chingadazo de realidad.

Aún así, recomiendo ampliamente que vean esta película porque casi no hacen historias de éste tipo.

***¡Nueva Información agregada!***

Resulta que Carlos Bolado tuvo infinidad de problemas y conflictos para realizar esta obra que en realidad trataba de ser una miniserie. Así es ¡Ibamos a tener muchísimos minutos más de historia! Al final se decidió hacer una edición de la miniserie y volverla película.

Es probable que demasiadas cosas de las que nos quejamos estuvieran bien en la miniserie pero acá en sangrons hablamos de lo que vimos y no de lo que jamás veremos (Algún día como para el año 2022 esperemos que estrenen la serie en cable o televisión).

Por fin tenemos noticias del soundtrack (o música incidental) de la película la cual pueden escuchar EN SU TOTALIDAD en este link de Bandcamp -> Música Original para Tlatelolco, verano del 68

Y respecto al lanzamiento de la película; desafortunadamente (probablemente los altos costos de maquila) no está a la venta en Blu-ray pero YA SE ENCUENTRA EN DVD. Lo pueden comprar en Mixup por $133

Gracias a un seguidor anónimo por darse a la tarea de buscar material de esta película a quien le corresponde el crédito.