Reseña: El Vengador del Futuro (Total Recall)

Título: El Vengador del Futuro

Título Original: Total Recall

País: Estados Unidos

Año: 2012    

Director: Len Wiseman

Reparto: Colin Farrell, Kate Beckinsale, Jessica Biel, Bryan Cranston, Bill Nighy

Duración: 118 minutos

Sinopsis: “Douglas Quaid (Farrell) trabaja en una fábrica de New Shanghai; tiene una bella esposa (Kate Beckinsale), y tras enterarse que una compañía llamada Rekall le ofrece una gran aventura como espía, decide tomar unas "vacaciones virtuales". Pero en el proceso de implantarle recuerdos algo sale mal, y el sistema se avería. Mientras las autoridades llegan a investigar, él escapa y hace equipo con una soldado rebelde (Jessica Biel) en una misión para atrapar al líder de la resistencia (Bill Nighy) y el malvado canciller Cohaagen (Bryan Cranston), quien quiere gobernar el mundo. Sin embargo, lo más difícil para Douglas es determinar si lo que vive es real, o si se trata de una fase del complejo programa de Rekall”.

Parece que fue ayer cuando en el canal 5 me emocionaba viendo a Arnold Schwarzenegger (Y que no se los apantallen, nadie se sabe de memoria cómo escribir su apellido, yo lo busqué en google. Antes de eso, escribí: Swarseneger jajaja) y a pesar de ser en la tele, en fullscreen, con cortes comerciales, doblada al español y que le quitaban escenas, me la pasaba muy bien contemplando tremendo churro gringo y sorprendiéndome al descubrir que Arnold corría en el metro de la Ciudad de México de la estación Chabacano para salir a la estación Insurgentes, cosa de la que debemos estar orgullosos pues nuestro metro era la visión del futuro (ooorale) es decir, que estábamos a la vanguardia… además, la cinta original estaba repleta de efectos especiales ochenteros entrándole a los noventa, los cuales, con mucha nostalgia nos hace recordar que existió un tiempo en el que los trucos de las películas eran creaciones del ingenio humano más que pegotines hechos por computadora. Ahora, lo sorprendente del asunto es que El Vengador del Futuro de 1990 debió haber sido un fracaso (La trama tenía más giros que un trompo, mutantes con anatomía extra, sets acartonados, villanos de caricatura) pero se convirtió en una película de culto. Yo sé la razón del éxito: La hicieron con el corazón.

Desde el punto que se le vea, es difícil reseñar El Vengador del Futuro sin dejar de hacer comparaciones con la original y a su vez, también es complicado hablar de ella sin  hacer mención de la primera versión. Por lo que trataré de ser lo más neutral posible.

Pues entré al cine con mucha emoción, en parte porque es un cine nuevo, lo cual implica que las butacas, el proyector, las bocinas y la pantalla están en su esplendor. No les voy a decir cuál es porque lo quiero disfrutar al máximo antes de que la plaza se vuelva famosa como ocurrió con el cine que está en Parque Delta al cual le saqué todo el jugo posible… ahora está bien pinche caro (¡Hasta $65 llegan a cobrar!) lleno de gentuza (con dinero, pero gentuza al fin) y no le meten ni un centavo al mantenimiento de las salas. Pero me estoy saliendo del tema jajaja.

Total que estaba en la comodidad del cine y pude notar algunas cosas que demeritaron al producto final.

Por ejemplo, tiran todo el dinero del mundo en efectos especiales de computadora pero parece ser no quisieron pagarle a alguien para que hiciera una trama decente. Esto lo menciono porque la historia que vemos en El Vengador del Futuro es de lo más genérica y simplona. Vamos pues, un cliché más de Hollywood. El clásico desastre mundial que deja inhabitable casi todo el planeta y sólo unas regiones pequeñas logran sobrevivir… hagan memoria, hay como 100 películas con el mismo cuento de siempre…

El cliché Hollywoodense número dos es la existencia de “grupos rebeldes” que se oponen al gobierno o sistema totalitario que controla el territorio (¿V de venganza les suena?, ¿Aeon Flux?, etc.)

Y así se puede uno seguir, lo que deja a uno con la preocupación y la zozobra de pensar que tal vez ya no existen, escritores, guionistas o un ser humano con un puñado de neuronas que sea capaz de crear algo decente… ¡Los guionistas de Hollywood son simios, changos y chimpancés genéticamente modificados! Jaja eso daría respuesta a muchas interrogantes del cine.

Lo que salva a esta cinta son las actuaciones, pues lucen sensacionales y por fin dejamos de ver a actores desconocidos en papeles de salvadores del mundo, acá en El Vengador del Futuro por lo menos sí vemos a las estrellas, las cuales, dicho sea de paso ya tienen colmillo para este tipo de cintas.

Kate Beckinsale y Jessica Biel contrario a lo que muchos puedan opinar, nos regalan un buen trabajo… por lo menos su servidor no sitió que sobreactuaban o que andaban perdidas en el set de filmación. Ellas a lo que van; a ser mujeres de acción y patear traseros ¡Sí señor!

Kate Beckinsale y Jessica Biel mamitas patea-traseros Yeah!

Y como se está viendo en los últimos años, el género masculino viene en decadencia (deportiva, artística, musical y toda actividad que termine en “mente”) y aquí el protagonista Colin Farrell, es el que desluce ante las chicas. Y no sólo él, también Bryan Cranston y Bill Nighy tienen actuaciones muy grises.

Parece ser que ciertas cosas no funcionaron muy bien en esta versión de la de 1990 y tal vez se deba a que se quisieron tomar las cosas muy en serio. Y pues esa sobriedad la volvió aburrida en ciertos momentos donde un pincelazo de humor pudo haberla elevado.

Les voy a compartir lo que Cristóbal Cabral de PinchePelícula.com opina: “Es una película sin alma, hueca y con la única virtud de ser filmada en una época donde la era digital permite fácilmente crear escenarios, fuera de eso, no propone nada que no se haya visto antes”.

Concluimos finalmente que nadie está culpando a Hollywood el que adapte y vuela a adaptar y readapatar textos para sus películas, es sólo que cada vez lo hace peor.

Es como si obtuvieras la mínima calificación aprobatoria en un examen y te dejaran repetirlo al lunes siguiente; Se supondría que ahora vas por la nota más alta, no a reprobarlo… y Hollywood se empeña en seguir reprobando un examen del que ya conoce las respuestas.