Título Original: The Hangover Part III
País: Estados Unidos
Año: 2013
Director: Todd Phillips
Reparto: Bradley Cooper, Ed
Helms, Zach Galifianakis, Melissa McCarthy, Heather Graham, John Goodman,
Justin Bartha, Ken Jeong
Duración:
100 minutos
Sinopsis:
“La tercera y última película de la
exitosísima franquicia creada por el director Todd Phillips. En esta ocasión,
no hay boda, ni despedida de soltero... ¿Qué podría salir mal, verdad? Pero
cuando la Manada (Phill, Alan, Stu y Doug) salen a la carretera, todas las
apuestas empiezan a correr”.
Aprovechando que
Cinemex la tiene “en exclusiva” (entre comillas porque en Cinemark también está
“en exclusiva”). Me fui a dar la vuelta por uno de sus complejos el día miércoles
y me encontré con que tienen precios súper bajos por temporada y el boleto
costó $16 pesos.
Cosa que me
resultó perfecta pues ¿Qué Pasó Ayer?
Parte III es una cinta muy corriente y $16 pesos es un precio más que justo
por verla.
Fui el miércoles
10 de este mes (julio de 2013, por si nos leen desde el futuro jajaja) y el
domingo (7) pasaron la primera por la televisión. Si bien ya la había visto antes
(también por la tele) como que me dieron ganas de ir a ver la tercera parte -Para reírme un poco…- me dije.
Y efectivamente;
me reí poco (carita triste).
No es que me
sienta una persona refinada y de gustos exquisitos pero esta cinta raya en lo
vulgar y lo corriente ¡Sin ningún sentido!
He visto cintas en
las que el argumento se basa en gases intestinales, o chistes con referencias a
penes y vaginas, bromas escatológicas, escenas de varios minutos con perros
apareándose… todas éstas bajo la clasificación de “película cómica” No estoy seguro de si mencionar la palabra pene
al tiempo que vemos a un personaje expulsar una flatulencia sea cómico pero los
gringos se mueren de la risa cuando esto pasa. La pequeña gran diferencia es que
ésas películas se concibieron así desde el principio y están dirigidas a un
segmento específico (y estúpido) de la población, de escasos o nulos estudios
académicos y con pobres bases culturales.
Son cintas basura
a las que nadie presta atención pues ni alfombra roja llegan a hacer y mucho menos
son criticadas en los medios… por no decir que muchos ni sabemos de la
existencia de esas obras.
Hay algunas cosas rescatables... pero no la vamos a defender |
No le encuentro la gracia de que a mí, espectador, me insulten en la cara pero tan devaluadas están las cosas que hasta en México este modelo ha funcionado.
Pruebas son las
famosas y exitosas presentaciones del payaso Platanito Show a la que la gente gustosamente asiste y paga para
que el payaso Platanito les miente la
madre o les diga putos, pendejos o lo
que sea… por no decir de otros programas de supuestos chistes que son realmente
concursos de albures.
Y repito que no
es que me crea muy fino y educado pero existían ahora sí que límites en lo que
se hacía… como las variedades de Polo
Polo, personaje cuyos chistes efectivamente eran de puras groserías pero
nunca se metía con el público. Por eso se les llamaba “el respetable público”
porque se les tenía respeto… ahora si no le dicen en la cara a la gente: “Chinguen a su madre” no se ríen.
Zach Galifianakis, Justin Bartha, Ed Helms, Heather Graham, Bradley Cooper, Ken Leong y Todd Phillips presentando la cinta en Londres, Inglaterra. Foto: Jon Furniss/Invision/AP |
No sé cuándo se perdió el rumbo de las cosas… Y lo bueno de que ésta es una reseña es que podemos hablar únicamente de lo malo jajaja no hay necesidad de ser imparciales, que lo sean los críticos profesionales. ¿Qué Pasó Ayer? Parte III es mala y degradante punto.
Las películas de ¿Qué pasó ayer? Me encantan, son mis favoritas del género de comedia, sobre todo el papel de Stu, interpretado por Ed Helms, quien me parece un excelente actor de comedia, pues es muy divertido.
ResponderBorrarComo lo mencioné: "están dirigidas a un segmento específico" lo malo es que quieren que esa cinta pensada para cierto tipo de público, la vean todos los demás...
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